Shohei Ohtani rompió recientemente una rara mala racha de cuatro juegos durante la serie de los Dodgers de Los Ángeles contra los Bravos de Atlanta y los Marlins de Miami. La sequía marcó la primera vez en más de tres meses que Ohtani pasó cuatro juegos consecutivos sin un jonrón o una base robada. Cortó la racha el martes con un jonrón en la tercera entrada en una derrota por 11-9 ante los Marlins.
Ohtani ahora cuenta con 48 jonrones y 48 robos con 11 juegos restantes en la temporada. A pesar de estar a punto de alcanzar el hito sin precedentes de 50/50, insiste en que no se siente presionado. “No hay presión”, dijo a través de un intérprete. “Solo trato de mantener turnos al bate de calidad independientemente de la situación”.
Ohtani, que actualmente se encuentra detrás de Aaron Judge (53) en jonrones y Elly De La Cruz (64) en robos, tiene unas impresionantes estadísticas de .287/.372/.611 que lo colocan en la carrera para convertirse en el primer bateador designado de tiempo completo en ganar un MVP. Sin embargo, su promedio de bateo y su porcentaje de embase han bajado desde agosto.
El mánager de los Dodgers, Dave Roberts, observó que el hito de 50/50 podría estar afectando el enfoque de Ohtani, notando más lanzamientos forzados y swings predeterminados. Roberts también insinuó la pequeña posibilidad de que Ohtani lance en la postemporada, señalando que la decisión se tomará después de las discusiones al regreso del equipo a Los Ángeles.
Cuando se le preguntó sobre el desafío físico de lanzar después de la cirugía, Ohtani sonrió irónicamente y dijo: “No estoy seguro”.
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