Saoirse Ronan puede ser una de las actrices más talentosas y solicitadas de Hollywood, pero incluso ella se pierde un poco en el torbellino de las giras de prensa internacionales. Promocionando dos películas importantes, The Outrun y Blitz, la genial estrella irlandesa ha estado cruzando continentes durante semanas, y eso la ha dejado un poco delirante.
“Acabo de llegar de Londres, así que estoy un poco en plan, ‘¿Quién soy? ¿Qué estoy diciendo?'”, bromeó Ronan recientemente, acurrucada en un sofá de la sala de espera durante una parada de prensa. Pero a pesar de la agitada agenda, está emocionada de volver a ser el centro de atención. “Realmente no he hecho esto en tanto tiempo. Estoy lista para salir de nuevo”.
Este es el primer gran esfuerzo promocional de Ronan desde Mujercitas de 2019. Aunque ha aparecido en algunas películas desde entonces, los retrasos por COVID-19 y las huelgas en Hollywood habían puesto en suspenso sus apariciones públicas. Los fans se sorprendieron y emocionaron al ver a Ronan en los recientes Premios Emmy, donde apareció con su nuevo marido, el actor Jack Lowden.
“¡Porque nunca salgo de casa!”, bromeó Ronan, de 30 años, con una risa cordial. “En cierto modo, es verdad. Hace mucho que no hago esto”.
Explorando la adicción en The Outrun
En su última película, The Outrun (en cines el viernes), Ronan asume uno de sus papeles más intensos emocionalmente hasta la fecha. La película, adaptada de las memorias de Amy Liptrot, sigue a Rona, una joven que regresa a su hogar en Escocia para desintoxicarse después de pasar toda su vida de fiesta en Londres. La película se adentra profundamente en la adicción y la recuperación, ofreciendo una perspectiva que rara vez se ve en Hollywood, a través de los ojos de una mujer joven.
A Ronan le atrajo la crudeza del personaje. “Estás viendo a alguien cruel, desagradable, una hija terrible y una mala amante, que ha perdido todo contacto con lo que es importante en la vida”, dijo. Para Ronan, era importante explorar estos defectos honestamente, sin la presión social que las mujeres a menudo enfrentan para mantener una “fachada pura”.
Para prepararse para el papel, Ronan asistió a una reunión de Alcohólicos Anónimos y habló extensamente con Liptrot, quien se sinceró sobre sus propias luchas emocionales durante la recuperación. “Amy dijo que cuando estaba en rehabilitación, simplemente no podía dejar de llorar. Había mucho que necesitaba salir a la superficie”, recordó Ronan. La experiencia ayudó a la actriz a comprender las complejidades emocionales de la adicción.
Filmar en la remota isla escocesa tuvo sus propios desafíos. Ronan aprendió una variedad de nuevas habilidades, incluida la de ayudar a nacer a siete corderos recién nacidos. “¡Tenía miedo de matar a esos corderitos!”, dijo riendo.
Un nuevo capítulo a los 30
A los 30, Ronan se siente más estable en su vida personal que nunca. “Mi vida se ha convertido en mucho más que un trabajo”, dijo, reflexionando sobre sus primeros años, cuando actuar era su principal forma de conectarse con el mundo. Ahora, disfruta de momentos más tranquilos con Lowden y su perro, Stella, y disfruta de los días que pasa haciendo caminatas y nadando en la naturaleza.
Después de años de centrarse únicamente en su carrera, Ronan ahora valora sus amistades y su vida personal tanto como sus logros profesionales. “Siento que soy parte de un grupo, algo que nunca pensé que sería”, admitió. “Durante mucho tiempo, eso fue todo lo que hice; así fue como conocí gente y le di sentido al mundo. Así que ahora, sentir que tengo una vida personal y social muy rica, es muy valioso para mí”.
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Crédito de la foto: Silvia Elizabeth Pangaro / Shutterstock.com