En un partido que representó la tensión de octubre, los Dodgers sobrevivieron a una remontada tardía de los Phillies para asegurar una victoria de 4-3 en el segundo juego de la Serie Divisional de la Liga Nacional y tomar una ventaja imponente de 2-0 en la serie. Desde el inicio, los lanzadores abridores Blake Snell y Jesús Luzardo mantuvieron a raya a ambos equipos, llevando el duelo sin anotaciones hasta bien entrada la segunda entrada.
El gran avance llegó en la séptima, cuando los Dodgers desataron una racha de cuatro carreras, respaldada por un sencillo decisivo de dos carreras de Will Smith y oportunos hits impulsores de Shohei Ohtani y otros. Pero Filadelfia se negó a rendirse. En la novena, Nick Castellanos conectó un doble para acercar el juego a uno. Los Phillies llenaron las bases, intensificando el drama.
En respuesta, Los Ángeles desplegó una jugada de rueda poco común en un intento de toque: Max Muncy cargó, Mookie Betts cubrió la tercera y se aplicó el toque para frustrar la carrera del empate. Freddie Freeman aprovechó un pase rápido para evitar un error, sellando uno de los finales de postemporada más intensos de los últimos tiempos.
Con la serie en Los Ángeles para el tercer juego, los Dodgers están a una victoria de avanzar, pero los Phillies, con o sin cicatrices de batalla, no se rendirán sin luchar.
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