En la 66ª entrega anual de los premios Grammy, Paris Jackson llamó la atención con una sorprendente transformación que dejó asombrados tanto a los fanáticos como a los entusiastas de la moda. Conocida por su rico tapiz de más de 80 tatuajes, Jackson apareció en la alfombra roja con un llamativo vestido negro sin tirantes, completo con un atrevido escote en el torso y una abertura alta, sin un solo tatuaje a la vista. Este cambio inesperado no fue el resultado de la eliminación del tatuaje, sino más bien de un proceso meticuloso que involucró la base en crema de cobertura total de Cover FX, como se revela en un video de lapso de tiempo compartido por Jackson.
El esfuerzo por ocultar temporalmente sus tatuajes tomó varias horas, un testimonio del deseo de Jackson de experimentar con su apariencia y permitir que su elección de moda brille sin distracciones. “Me gusta cambiar las cosas”, explicó Jackson, destacando su aprecio tanto por el arte corporal como por la alta costura.
Si bien algunos fanáticos expresaron su decepción por la ausencia de sus tatuajes característicos, muchos otros aplaudieron su versatilidad y la belleza que irradia, con o sin tinta. La actitud abierta de Jackson hacia la modificación corporal, incluida su decisión espontánea de hacerse un tatuaje extraterrestre como su primera tinta y los tatuajes a juego con su padrino, Macaulay Culkin, subraya su intrépida autoexpresión y el significado personal de cada pieza.
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Crédito de la foto: Tinseltown / Shutterstock.com