El reciente estreno de la película de terror de Ryan Coogler, Sinners, ha desatado un debate en Hollywood, no por su contenido, sino por su rendimiento en taquilla. A pesar de recaudar 61 millones de dólares a nivel mundial en su fin de semana de estreno, el informe de Variety, que sugiere que “la rentabilidad sigue siendo lejana” debido al presupuesto de 90 millones de dólares de la película y los costos de marketing, ha generado críticas de figuras de la industria.
El actor Ben Stiller cuestionó la narrativa, tuiteando: “¿En qué universo un estreno de 60 millones de dólares para una película original de estudio justifica este titular?”. Patrick Schwarzenegger se hizo eco de esta opinión, señalando: “Es el fin de semana de estreno…”.
El cineasta Joe Russo comentó con sarcasmo sobre las expectativas, mientras que Franklin Leonard destacó la percepción de un doble rasero en la cobertura mediática, comparándola con la recepción de “Once Upon a Time in Hollywood” de Quentin Tarantino.
Este discurso subraya una conversación más amplia sobre las narrativas mediáticas y su impacto en las películas dirigidas por creativos negros. Sinners, protagonizada por Michael B. Jordan y Hailee Steinfeld, no solo lideró la taquilla, sino que también desató el debate sobre la representación y la equidad en Hollywood.
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Crédito de la foto: Kathy Hutchins / Shutterstock.com