Elden Campbell muere a los 57 años: de leyenda en Clemson a campeón de la NBA

Empty chair on basketball court

Elden Campbell — una figura imponente en el baloncesto universitario y un veterano constante en la NBA — falleció a los 57 años. La Universidad de Clemson anunció su deceso este martes, sin revelar la causa. La noticia fue recibida con una oleada de tristeza y admiración en toda la comunidad del baloncesto.

Campbell llegó a Clemson en 1986 y, en cuatro temporadas, se convirtió en el máximo anotador histórico de la universidad, con 1,880 puntos — un récord que aún permanece. También se destacó como una fuerza defensiva, terminando segundo en bloqueos (334) y octavo en rebotes (836) en la historia del programa. Su temporada senior culminó con el único título de temporada regular en la ACC para Clemson y una aparición en el Sweet 16 del Torneo de la NCAA.

Seleccionado en el puesto 27 del Draft de la NBA de 1990 por Los Angeles Lakers, Campbell inició una carrera profesional marcada por la constancia y la longevidad. Pasó nueve temporadas en Los Ángeles antes de jugar en varias franquicias. Su carrera se extendió durante 15 años y 1,044 partidos, con promedios de 10.3 puntos, 5.9 rebotes y 1.5 bloqueos por encuentro — cifras notables para un jugador de rol respetado por su presencia defensiva y profesionalismo.

Su logro más importante en la NBA llegó en 2004, cuando se coronó campeón con los Detroit Pistons. Ese título fue el broche de oro para una trayectoria que abarcó desde el ocaso de la era “Showtime” de los Lakers hasta los inicios de la era moderna de la liga.

Sin embargo, el legado más profundo de Campbell va más allá de las estadísticas o los trofeos. Compañeros, entrenadores y aficionados lo recuerdan como “Easy E”, un apodo que reflejaba su carácter tranquilo, estilo relajado y compromiso silencioso con sus equipos dentro y fuera de la cancha.

Hoy, el mundo del baloncesto lamenta la pérdida de un pívot clásico cuya carrera unió generaciones y cuyo impacto se sentirá por muchos años más. Elden Campbell fue más que un anotador o bloqueador: fue un compañero confiable y un ejemplo para jugadores y aficionados por igual.