En sus próximas memorias, Semi-Well-Adjusted Attempt Literally Everything (Una chica semi-adaptada a pesar de todo), Alyson Stoner revela un capítulo oscuro de su trayectoria en Hollywood, uno que casi la destrozó física y espiritualmente.
Conocida por sus papeles en Cheaper by the Dozen, Camp Rock y los icónicos videos musicales de Missy Elliott, Stoner comparte por primera vez su desgarrador intento por conseguir el papel de Katniss Everdeen en Los Juegos del Hambre. Desesperada por transformarse físicamente en la valiente heroína, la entonces actriz de 17 años se comprometió a un régimen de entrenamiento extremo: siete horas diarias de ejercicio con déficit calórico en un campamento de adelgazamiento, a pesar de estar por debajo de su peso ideal.
“Pensé que buscaba fuerza”, escribe, “pero en realidad buscaba aprobación”.
Stoner describe cómo se perdió a sí misma en el proceso, culminando en una borrachera devastadora y un colapso emocional tras enterarse de que no consiguió el papel. Su vívido recuerdo expone un sistema profundamente defectuoso donde los estándares de la industria priman sobre la salud, incluso para los menores.
Aunque nunca se convirtió en Katniss, la brutal honestidad de Stoner brilla como el tipo de heroína que necesitamos: alguien dispuesto a compartir la verdad, sin importar lo dolorosa que sea. Sus memorias se publican el 12 de agosto.
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Crédito de la foto: Ga Fullner / Shutterstock.com