Jennifer Lopez y Ben Affleck están poniendo en pausa sus esfuerzos por deshacerse de su propiedad en Beverly Hills tras casi un año de visitas infructuosas y rebajas de precio.
La expareja, que finalizó su divorcio a principios de este año, inicialmente puso a la venta la propiedad de 38,000 pies cuadrados por 68 millones de dólares en julio de 2024. Tras 10 meses sin encontrar compradores serios, rebajaron el precio en 8.5 millones de dólares, hasta los 59.5 millones. Pero ni siquiera el descuento logró generar suficiente interés en el estancado mercado del lujo.
“Es un mercado difícil para los vendedores, especialmente a ese precio”, comentó un experto inmobiliario. “Retirarla del mercado hasta que las condiciones mejoren fue la decisión más inteligente”.
Lopez y Affleck, quienes compraron la extensa propiedad por poco más de 60 millones de dólares en 2023, esperaban vender la casa discretamente fuera del mercado para evitar la publicidad. La mansión cuenta con 12 habitaciones, 24 baños, un ático para invitados, canchas deportivas y un garaje para 12 coches.
Desde su separación, ambas estrellas se han mudado a nuevas residencias: Lopez en una propiedad de 18 millones de dólares en Los Ángeles, y Affleck en una residencia de 20 millones de dólares en Brentwood, descrita como “sofisticada” y “familiar”.
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